Gionella se muestra como estudiante de leyes, aplicada y responsable, se levanta a las 5:00 AM, se baña, se viste y se arregla, solo tarda 23 minutos en llegar a la universidad, donde pasa 6 horas y en sus ratos libres se fuma 12 cigarros. A 30 minutos luego de las 12, toma su carro y parte del reciento universitario de vuelta a su hogar, así se va su mañana.
La tarde solo es un desperdicio de tiempo, pues ella no hace nada más que dormir para poder llenarse de energía y prepararse para la caída del sol; el reloj apunta las 6:54 mientras el celular de Gio suena al ritmo de un “dale go, go”, que la despierta desconcertadamente para notar que solo era un mensaje de su amiga Isabel preguntando ¿Qué hay para hoy?
Son las 7:30 y es viernes, Gionella toma un baño, y sale en bata directo al closet, para escoger el atuendo de esta noche donde el elegido es un vestidito café de mangas largas y pronunciado escote, nada que no la hiciera lucir; el celular suena de nuevo, “dale go, go”, pero esta vez es una llamada, su novio Leroy avisando que pasará por ella a eso de las 10:30 pm.
Sombra oscura en sus parpados con fronteras de delineador negro, rubor que alumbra sus pómulos y brillo de color en sus labios, es entonces que esta lista para colocarse su vestido de poca tela, esta casi lista. “Dale go, go”, es leroy ya esta en la puerta de su casa, así que corre a ponerse sus tacones de 10 centímetros y escarcha.
Música estridente inundan el ambiente del lugar, llegó con su novio, pero se detuvo a saludar a unos amigos y sin darse cuenta paso la mitad de la noche bailando con ellos, puesto que el alcohol la hizo relajarse y olvidarse, cuando recuerda se detiene, y voltea, en medio del alcohol, la música y el sudor, descubrió a Leroy en un ardiente beso con su amiga Isabel.
Angela Blones
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